Basado en el desarrollo tecnológico del método alfanumérico, creado por el matemático francés Pierre Herigon en 1644. Este sistema, permite alcanzar una memorización numérica sin límites, todo ello a través del procesamiento de números en forma de imágenes.
El Memorize-IDi, o Calculadora Mnemotécnica, creada por el pedagogo español J. Ramón García Guinarte, permite procesar de forma automática cualquier número en sencillas imágenes, multiplicando la eficacia del antiguo método Herigón.
Por otra parte, debemos tener en cuenta que el cerebro humano procesa los números de una forma predominante en su hemisferio izquierdo, mientras que las imágenes son procesadas por el derecho (todo ello para las personas diestras).
Por tanto, esta aplicación permite un entrenamiento totalmente inusual para nuestra mente, pues los datos numéricos pasan a ser procesados por la parte derecha del cerebro (en forma de imágenes).
Solo te llevará unos minutos
Aprende un sencillo código. Cada númeo del 0 al 9 se corresponde con una o varias letras. Deberás recordar las equivalencias.
La aplicación facilita esta tarea con unas bonitas animaciones que transforman los números en sus letras equivalentes.
Tienes que dominar perfectamente este código antes de proseguir
Demuestra lo que sabes
Vamos a probar lo controlado que tienes el código con varios de niveles en el test.
Debes superar al menos dos niveles del test (principiante y medio) antes de que la máquina te permita continuar.
Cuanto más practiques los test, mejor dominarás la técnica.
6 ejemplos para practicar
Te mostramos de forma gráfica como utilizar de forma óptima este increible método de memorización.
Tienes que revisar todos y prestar mucha atención.
Fíjate como los dígitos se dividen en pares de números empezando de derecha a izquierda.
Ya estás preparado para ser un genio de la memorización
Solo tienes que utilizar el Memorize y las fechas, claves, las medidas o cualquier otro número que necesites recordar estará en tu cabeza almacenado de forma permanente.
Introduces el número que deseas memorizar y la Calculadora Mnemotécnica lo transformará en imágenes.
Aplicación tecnológica basada en el desarrollo del que posiblemente haya sido el sistema de memorización numérica más eficaz de todos los tiempos.
Durante años se ha mantenido un paradigma que describía a las personas como poseedoras de una única inteligencia, y a mayores también se creía posible cuantificarla de un modo inequívoco.
En el año 1983, Howard Gardner, investigador de la universidad de Harvard, pone en jaque a todo el sistema educativo de los Estados Unidos con la publicación de su libro “Las Estructuras de la Mente: La Teoría de las Inteligencias Múltiples”.
Este neuropsicólogo, codirector del Proyecto Zero en la Escuela Superior de Educación de Harvard, postula que el ser humano tiene por lo menos ocho inteligencias diferentes, que se desarrollan de diferentes modos y a distintos niveles.
Estas son: la Inteligencia Lingüística, Lógico-matemática, Musical, Corporal-Cinestésica, Visual-Espacial, Interpersonal, Intrapersonal y Naturalista
No obstante, hoy en día los programas de enseñanza aún siguen prestando la mayor parte de su atención a la inteligencia lingüística y a la lógico-matemática, dando una mínima importancia a las demás. De este modo se sigue coartando las oportunidades de éxito a muchos niños que hubiesen podido llegar a ser verdaderos genios.
La capacidad de resolver problemas o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas.
Se amplía el campo de lo que, hasta aquel momento, se entendía por inteligencia, dejando claro que la brillantez académica no es sinónimo de éxito, pues en la vida no basta con tener un gran expediente académico.
Podemos encontrar muchos ejemplos de personas con gran capacidad intelectual pero incapaces de triunfar en los negocios, de expresarse en público, o de tener amigos. Lo cual constata que diferentes ámbitos de la vida requieren diferentes tipos de inteligencia.
Gardner define la inteligencia como una capacidad. Hasta hace muy poco tiempo la inteligencia se consideraba algo innato e inamovible y se suponía que la educación no podía cambiar ese hecho.
Al definir la inteligencia como una capacidad, Gardner la convierte en una destreza que se puede desarrollar, sin negar a su vez su componente genético.
Todos nacemos con unas potencialidades marcadas por la genética. Pero esas potencialidades se van a desarrollar dependiendo del medio ambiente, de nuestras experiencias, así como de la educación recibida.
Ningún deportista de elite alcanza el éxito sin entrenamiento, por buenas que sean sus cualidades naturales. Lo mismo se puede decir de matemáticos, los músicos, científicos o simplemente de personas emocionalmente inteligentes.
Naturalmente todos tenemos las ocho inteligencias en mayor o menor medida. Al igual que con los estilos de aprendizaje no hay tipos puros. Un ingeniero necesita una inteligencia espacial bien desarrollada, pero también necesita de todas las demás, de la inteligencia lógico matemática para poder realizar cálculos de estructuras, de la inteligencia interpersonal para poder presentar sus proyectos, de la inteligencia corporal-cinestésica moverse en la obra, etc.
Howard Gardner enfatiza el hecho de que todas las inteligencias son igualmente importantes. El problema es que nuestro sistema escolar no las trata por igual y ha ensalzado las dos primeras de la lista, (la inteligencia lógico-matemática y la inteligencia lingüística) hasta el punto de negar la existencia de las demás.
Para Gardner es evidente que, sabiendo lo que sabemos sobre estilos de aprendizaje, tipos de inteligencia y estilos de enseñanza, resulte absurdo que sigamos insistiendo en que todos nuestros alumnos aprendan de la misma manera.
La misma materia se puede presentar de formas muy diversas que permitan al alumno asimilarla partiendo de sus capacidades y aprovechando sus puntos fuertes. Pero, además, tenemos que plantearnos si una educación centrada en sólo dos tipos de inteligencia es la más adecuada para preparar a nuestros jóvenes para vivir en un mundo cada vez más complejo.
Las nuevas tecnologías suponen un recurso muy interesante de cara al desarrollo de las inteligencias múltiples. Con estos nuevos sistemas podemos facilitar que nuestros alumnos apliquen y estimulen de forma conjunta diferentes inteligencias. Todo ello con un componente lúdico y muy motivador.
Memorize IDI se ha posicionado como uno de los mejores instrumentos para el desarrollo de las Inteligencias Múltiples al tiempo que permite convertir a cualquier usuario en un prodigio de la memorización numérica.